Los fideicomisos se consolidan como una de las mejores estrategias para la industria inmobiliaria pues permite blindar bienes y operaciones con toda la certeza jurídica para sus participantes.
“Este 2020, pese a ser un año enmarcado por la pandemia, notamos que tuvo una dinámica constante en la constitución de fideicomisos, lo que representó en términos porcentuales un crecimiento del 34% en comparación con lo obtenido durante 2019. En general el crecimiento se dio a nivel nacional, sin embargo, la zona sureste del país se vio privilegiada a diferencia de otras”, señala Ernesto Fragoso Montaño, director corporativo fiduciario de Banco Inmobiliario Mexicano (BIM).
El fideicomiso es un contrato a través del cual se aportan bienes o derechos que podrían ser inmuebles, recursos, muebles, derechos, entre otros para destinarse a determinados fines que acuerden las partes, la Institución Fiduciaria recibe esos bienes y ejecuta los fines apegándose única y exclusivamente a lo pactado en el fideicomiso.
Este esquema está dirigido a personas morales y físicas con perfil empresarial y puede ser versátil para diferentes fines, tras la pandemia y las consecuencias económicas que ha dejado, este tipo de contratos han sido de gran utilidad para sus clientes para realizar planeaciones patrimoniales testamentarias, esquemas asociativos para desarrollar inmuebles, dar garantía necesaria para acceder a créditos y contratar deudas, funcionar como vehículo de acreditamiento, entre otros.
Estas herramientas financieras han ido de manera creciente en el mundo de los negocios, al grado de emplearse actualmente como una garantía en operaciones de crédito, remplazando con grandes ventajas a las garantías reales como las hipotecas.
Fragoso, además, detalla que “el fideicomiso se constituye como un vehículo idóneo para consolidar temas personales y de negocio, ya que es esquema seguro y ofrece gran certidumbre a las partes contratantes. Los tipos de fideicomisos que observamos con mayor crecimiento en 2020 y en lo que va del año, son los Fideicomisos para Desarrollos Inmobiliarios en proyectos de vivienda, hoteles, desarrollos turísticos, proyectos de segundas viviendas para nacionales y extranjeros, de igual forma los Fideicomisos de Zona Restringida han tenido un crecimiento importante, estos contratos permiten a extranjeros adquirir un inmueble en playas y fronteras mexicanas”.
Toda clase de bienes y derechos (inmuebles, recursos, derechos, derechos de cobro, acciones, etcétera) pueden ser objeto de fideicomisos, salvo aquellos que, conforme a la ley sean estrictamente personales de su titular.
Actualmente, BIM tiene en su cartera más de 33,000 millones de pesos de activos administrados en fideicomisos lo que posiciona al banco entre los 20 fiduciarios más importantes del país.