8 efectos de la pandemia en el sector inmobiliario

Pese al fuerte impacto inicial en la comercialización y construcción de oficinas y viviendas, el sector comienza a adaptarse.

Los edificios corporativos han sido uno de los segmentos inmobiliarios más afectados por la pandemia de covid-19.
El sector de oficinas ha sido de uno de los más afectados por la pandemia de covid-19 a nivel global. Foto: Anasella Acosta

La pandemia provocada por el COVID-19 ha cambiado la forma en la que vivimos, en la que trabajamos y hacemos negocios. Sin embargo, todos nos preguntamos, ¿qué tanto la cambiará en el largo plazo?, ¿serán estos cambios duraderos una vez que superemos la emergencia sanitaria?

De acuerdo con la consultora inmobiliaria y de valuación Tinsa México, son 8 los efectos de la contingencia sanitaria en el mercado inmobiliario:

  1. Se detuvo la escalada de valores que había en la Ciudad de México en la que los valores crecían a tasas del 8% anual, es decir, se han mantenido los valores del 2019.
  2. No ha habido bajas en los valores, esto significa que no existía en la CDMX una burbuja inmobiliaria, como se había especulado.
  3. Con la recuperación, que en el sector inmobiliario ya ha iniciado, podemos esperar una tendencia alcista en los valores en el mediano plazo, siempre y cuando la caída en el empleo no sea mayor de la que hay en este momento.
  4. La pandemia generó una mayor presión a la banca en términos de competencia para no perder los ritmos de colocación de los créditos hipotecarios, en consecuencia, están ofreciendo actualmente las tasas más bajas que habíamos visto en varios años, desde 7.5%.
  5. Las oficinas no desaparecerán, como muchos vaticinan, seguramente, si bien tendremos más esquemas de flexibilidad en la presencia dentro de la oficina, dudamos que éstas tiendan a eliminarse, seguramente lo que vemos ahora impulsado por el COVID-19 y los grandes ahorros que están teniendo los corporativos, será puesto en perspectiva y matizado contra otros temas como la planeación estratégica y el trabajo colectivo.
  6. Sin embargo, siguiendo estos esquemas más flexibles, podemos decir que el home office llegó para quedarse, por lo que en los próximos años veremos algunas modificaciones encaminadas a generar espacios más confortables para que la gente pueda trabajar en casa, sin necesidad de contar con una mayor superficie, ya que la tendencia hacia una mayor densidad urbana no cambiará  en las grandes ciudades por la escasez de suelo y la necesidad de mantenerse cerca de las fuentes de trabajo.
  7. Asimismo, en la parte de infraestructura, algo que se había dejado reservado para oficinas, tendrá que haber una mayor preocupación por brindar una conexión de fibra óptica o internet de alta velocidad en la vivienda, esas conexiones se ofrecerán como “llave en mano” para que la conexión sea sencilla y cubra todas las áreas de la casa o departamento.
  8. En cuanto al éxodo de las grandes ciudades, una tendencia que puede verse en urbes como Nueva York o Madrid, hemos visto una salida temporal a localidades cercanas, es decir, las personas que tienen casas de fin de semana han pasado largos periodos en ellas; sin embargo, no podemos identificar una tendencia clara a largo plazo hasta que no se definan las condiciones de trabajo post-pandemia.

“Si bien hay una crisis en el sector inmobiliario, no fue tan dura como la esperábamos; hay una recuperación en el desarrollo de vivienda y en la colocación de créditos hipotecarios con la que podemos esperar que se sigan dando compraventas, lo que ha transmitido cierta tranquilidad. Esperemos que se mantenga controlada la pandemia en los próximos meses y con ello, la recuperación que hemos iniciado se mantenga”, señaló Jesús Ramón Orozco de la Fuente, Director General de Tinsa México.

Predicciones 2021 para oficinas. Reinventar el espacio

Confianza, balance vida-trabajo, inteligencia artificial y automatización son algunas de las herramientas para reimaginar las oficinas.

Oficinas corporativas
Lecciones. Las empresas tendrán que aplicar con creatividad las enseñanzas de 2020 para los espacios de oficinas. Foto: Cortesía Torre Reforma

Resistencia y creatividad definen a las empresas en el arranque de 2021. Con esas cualidades los tomadores de decisiones en los espacios de trabajo podrán aprovechar las lecciones del último año para reimaginar un espacio de trabajo mejor para el futuro, de acuerdo con el Workforce Institute de UKG.

En el año que arranca y con una pandemia que aún no termina, a pesar de que ha iniciado la primera etapa de vacunación en algunos países, incluyendo México, las empresas tendrán que elegir qué prácticas implementadas durante la “era pandemia” se quedan y cuáles se van.

El año 2020 proporcionó valiosas lecciones sobre la seguridad y el bienestar de los empleados, la programación alternativa y el trabajo a distancia, entre otras. Mientras los líderes buscaron, y lo seguirán haciendo, equilibrar la sostenibilidad financiera en una economía en recuperación

Esas decisiones irán moldeando los espacios de trabajo durante el 2021. De acuerdo con el instituto especializado en espacio laboral, ahora las empresas “irán más allá de reaccionar y comenzarán a reenfocar y reinventar” en sus procesos, políticas y prácticas.

Los espacios de trabajo de todo el mundo tendrán la oportunidad de aprovechar las lecciones aprendidas en el último año para reimaginar un mundo de trabajo mejor para el futuro“.

Chris Mullen, director ejecutivo del Workforce Institute de UKG

Aunque tomará tomará tiempo palpar los resultados de esas decisiones, hay temas que se consolidarán este 2021, de acuerdo con las predicciones del instituto del Reino Unido, entre las que destacan.

1. La confianza será imperativo para el éxito

La confianza será un componente necesario para navegar con éxito en los años venideros a medida que las organizaciones desarrollen nuevas políticas, gestionen fuerzas de trabajo híbridas y consideren requisitos sin precedentes para los empleados, hasta incluyendo posibles mandatos de vacunación.

La confianza será especialmente importante para las personas que deben estar presentes para hacer su trabajo, una población que se enfrenta cada vez más al agotamiento mental, emocional y físico a medida que continúa la pandemia de COVID-19. Las organizaciones explorarán nuevas vías para apoyar las necesidades únicas de toda su fuerza laboral, mitigar los efectos del agotamiento y posicionarse mejor como destino para el talento.

2. La vida de los empleados por delante del trabajo, pilar del liderazgo

Las organizaciones que se destaquen en 2021 serán dirigidas por una gestión compasiva e inclusiva que enfatice la empatía, el bienestar y la pertenencia.

Se deben tomar medidas deliberadas, no sólo para detener la recesión actual, sino para garantizar que los grupos desproporcionadamente afectados -incluidas las mujeres (especialmente las madres trabajadoras), las personas de color, las personas con discapacidades y los veteranos- no se queden aún más rezagados a medida que se amplía el abismo potencial.

La afluencia de nuevos CEOs y CXOs (Director de Experiencias) de la Generación X traerá la diversidad -en género, raza y pensamiento- a las suites ejecutivas. 

3. Pandemia, economía y cambio regulatorio presionan la rotación de personal  

Se depara que durante el año 2021 se verá un aumento en las violaciones laborales y de recursos humanos. Las personas que operan bajo una tremenda tensión e incertidumbre durante un período de tiempo tan prolongado tendrán un mayor riesgo a tomar malas decisiones, incluso con las mejores intenciones.

El agotamiento puede llevar a una alta rotación de personal a pesar de la difícil economía. Las organizaciones no necesitan esperar a que se establezcan regulaciones para hacer lo que es correcto para su fuerza laboral.

4. La apuesta por la Inteligencia Artificial (IA) y la automatización es prioridad

Las implementaciones exitosas de IA aliviarán la carga de los gerentes y empoderarán a los empleados además de que ayudarán a medir el sentimiento y a acelerar la toma de decisiones para todos. Las organizaciones (y sus colaboradores) prestarán mayor atención a la tecnología actual y futura, exigiendo un valor significativo a los sistemas -tanto antiguos como nuevos- y asegurándose de que mejoren de forma cuantificable el rendimiento, la productividad y la experiencia general de los empleados.

Algunos ejemplos son las llamadas de Zoom con amigos y familiares, la recolección de comestibles en el supermercado bajo pedido y la entrega en dos días de prácticamente cualquier producto. La lista es interminable. Esto presionará aún más a las organizaciones para que ofrezcan una experiencia tecnológica en el lugar de trabajo que coincida con la experiencia tecnológica de sus empleados.